Una clave para curarse del dolor y el sufrimiento emocional consiste en permitirse sentir sus sentimientos. Siempre que le digo esto a un cliente, me preguntan por qué, por qué querrían sentir dolor, tristeza o miedo. Han propuesto tantas estrategias para evitar sentir y aquí les pido que lo hagan. Entonces, la clave no es solo reconocer cómo nos sentimos, sino que cómo lo hacemos es crucial.

Aquí es donde introduzco la atención plena. La atención plena es prestar atención a algo a propósito, en este caso, notar sus sentimientos o emociones aquí y ahora sin juzgar . Así que aquí está la clave: no juzgar. Llevar nuestra atención amable y sin prejuicios a nuestro mundo interior ayuda a aclarar y calmar nuestra mente a medida que nuestros pensamientos y sentimientos se estabilizan. La atención plena puede ayudarnos a sentirnos más relajados y concentrados.

Para aprender a practicar la atención plena, debe desarrollar las siguientes seis habilidades esenciales:

Establece tu intención
Tu intención se refiere al objetivo que te propusiste, a lo que deseas prestar atención. Puede optar por prestar atención a su respiración, a su entorno oa un sentimiento. La atención plena es la capacidad de devolver tu atención a tu intención constantemente. Si surge alguna distracción (pensamientos o sentimientos), puede notar las distracciones y dejarlas a un lado suavemente mientras devuelve su atención a su intención.

Puede hacer esto con cualquier tarea. Puedes hacerlo durante una sesión de mindfulness “formal” en la que puedes estar tumbado con los ojos cerrados y concentrado en algo o puedes practicarlo durante todo el día con cualquier actividad. Por ejemplo, puede estar atento mientras se baña, come o cocina. Simplemente preste atención a toda su experiencia. Por ejemplo, cuando te bañas, nota los olores, nota cómo se siente tu piel mientras la lavas. Observe cada parte de su cuerpo. Observe la temperatura del agua y cómo se siente cuando toca su piel. Observe el vapor y cómo se siente al inhalarlo.

Cultivar la conciencia de la conciencia
Una capacidad asombrosa que solo los humanos tienen es la de ser conscientes de la conciencia. Esto significa ser consciente de lo que está experimentando aquí y ahora. La clave es simplemente estar consciente sin intentar cambiar nada.

Intente lo siguiente: Observe un pensamiento, un sentimiento o una sensación. Sea consciente de su conocimiento de esta experiencia en particular. Ahora simplemente observe y acepte lo que está observando sin querer cambiar nada.

Atención de enfoque
Si prestas atención a tu día, podrás darte cuenta de cómo nos bombardean tantas cosas que llaman tu atención. A veces nos sentimos abrumados por todas estas distracciones. Mindfulness es la capacidad de regular aquello a lo que prestas atención, ya que eres capaz de enfocar tu atención en lo que desees atender, en tu intención.

Esta habilidad le ayudará a mejorar su concentración, memoria y tener claridad mental general. Practica esto de la siguiente manera:

Establece tu intención de prestar atención
Determine a qué desea prestar atención
Note todo sobre lo que decidió prestar atención.
Si surge alguna distracción, fíjela, reconózcala y déjela a un lado con cuidado.
Devuelve tu enfoque a tu intención
Realice los pasos 2 a 5 tantas veces como desee
Observe lo que sucede cuando puede estar atento. Observe cualquier cambio en sus sensaciones, emociones, pensamientos o sentimientos. Vea si puede notar que su mente se aclara y alguna sensación de calma.

La práctica afecta la regulación
Cuanto más practiques la atención plena, más capaz será tu cerebro de regularse a sí mismo. Estás creando y fortaleciendo vías neuronales que calman tu mente. La atención plena ayuda a disminuir los incidentes en los que nos desencadenamos, donde surgen emociones intensas y podemos terminar haciendo o diciendo cosas de las que luego nos arrepentimos. Ser conscientes nos permite regular mejor las emociones y estar más presentes en el aquí y ahora.

A veces necesitamos un recordatorio o una llave que nos ayude a ir a nuestro lugar tranquilo. Siempre que encuentres ese lugar dentro de ti, fíjate en él y encuentra una palabra o un color que se adapte mejor a tu experiencia de tranquilidad. Observe la calma en todo su cuerpo y elija una palabra como «calma, calma» o un color como una luz azul. Siempre que esté haciendo algo, recuerde estar atento y decirse su palabra o imaginar su color mientras regresa a ese lugar tranquilo y claro.

Compasión, amor y bondad hacia ti mismo y hacia los demás.
¿Alguna vez has notado cómo te hablas a ti mismo de ti? Somos nuestro peor y más duro crítico. Decimos cosas que nunca le diríamos a nadie que amamos, pero nos las decimos a nosotros mismos. Una clave en la atención plena es no juzgar, aceptar, ser amables, compasivos y amorosos con nosotros mismos.

Vea si puede conectarse con sentimientos de amor y enviárselos. Sea amable al prestar atención a su mundo interior, observe su intención con amabilidad mientras simplemente observa y acepta.

Durante una semana, intente practicar la compasión, la bondad y el amor:

Hacia ti mismo
Hacia un buen amigo
Hacia una persona neutral
Hacia una persona dificil
Observe su experiencia mientras está siendo amable, cariñoso y compasivo. Observe cómo era ser así.

Tu experiencia con Mindfulness
Después de practicar la atención plena durante una semana, vea si puede tener su definición de atención plena. Vea si puede ser consciente de su experiencia de ser consciente. Notarlo.

Me encantaría conocer tu experiencia con la atención plena siguiendo estas instrucciones. Te deseo mucha paz y claridad mientras haces de la atención plena parte de tu forma de ser. ¿Quieres aprender más sobre cómo expresarte con mayor libertad? Contáctame